miércoles, 6 de marzo de 2013


Igualdad, no nos engañemos todavía falta mucho…

 

Que en pleno siglo XXI,  llegue una fecha como la del 8 de Marzo, y no estemos festejando los logros conseguidos por el conjunto de la sociedad en cuanto a la igualdad de género entre los seres humanos, como hecho histórico, sino que siga siendo una jornada de reivindicación, y día que vale para  sacudir  la conciencia de todos y todas. Sabiendo que además, desgraciadamente es una lucha que hay que continuar diariamente.

La realidad, es que  quienes tienen la obligación de favorecer políticas de igualdad,  cuestionan y critican las políticas positivas que favorezcan tal hecho. Siendo más grave cuando se retiran los recursos públicos que posibilitan la prevención, la información y el apoyo. Igualmente la perdida de los medios económicos para  aquellas acciones que vayan en la dirección de favorecer la culturalización  y educación en paridad y el cultivo del respeto hacia nuestras congéneres.

Que no nos vengan con la mentira de la crisis, que aunque siendo ésta real, existen medios públicos en esta sociedad actual, que de administrarse adecuadamente y asignándose correspondientemente a las necesidades y no a gastos innecesarios, inútiles o suntuosos, posibilitarían estrategias de igualdad,   valga como mal ejemplo nuestro propio ayuntamiento.

Teniendo presente que el medio y lugar más propicio para la prevención es la educación y la escuela, y si habláramos de asignaturas complementarias obligatorias, la de la igualdad tendría que ser la elegida. Si existe la voluntad de avanzar y lograr dicho objetivo, tenemos los medios, el espacio y los profesionales. Si no se ponen en marcha es porque no hay arrojo, ni interés, y para los poderes públicos con capacidad de realizarlo, no está entre  sus prioridades.

  Estaremos de acuerdo, que efectivamente a la igualdad de género se debería llegar por los meritos propios de cada personas, independientemente de ser hombre o mujer, pero en este caso, ingenuidad la justa, los hechos nos hablan claramente de que no se dan esas añoradas condiciones. Todos somos responsables, unos por omisión otros por dejación.

Hay acciones  que diariamente golpean y debilitan deliberadamente y muchas de forma trágica, la igualdad de género, y no nos podemos permitir seguir agarrados a la débil rama verde de la  esperanza, y mucho menos a la dañina resignación. Hay que manifestar nuestra indignación y exigir en las instituciones públicas, en las organizaciones o actividades, políticas, sociales, culturales, educativas, laborales, etc. en las que participemos que se encuentre como referente de trabajo y apoyo, el que se posibilite en la sociedad, sin complejos ni escusas, la igualdad de género.

Alternativa por San Mateo, sus mujeres y hombres, asumimos por unanimidad trabajar en ésta dirección, posibilitando que en toda institución u organización en la que sea posible nuestra presencia, exigir la igualdad y paridad entre sus miembros y posibilitar políticas que vayan en la dirección aquí expresada y desarrolladas en el ideario de la organización.

 
 

Miguel Hidalgo Sánchez

Miembro de Alternativa Por San Mateo.